martes, 1 de octubre de 2013

Acerca de sus labios, acerca de sus ojos.

Se miran detenidamente: dudando.
Se encuentran tan cercanos el uno al otro, que ya pueden oler sus perfumes.
aquel olor con el que nacemos y que portamos para ciertas personas.

Sus ojos se mueven a la velocidad de la luz, analizan todo los espacios:
sus ojos, sus pestañas, sus cejas, sus pómulos, y sus labios. sobre todo sus labios.
Aquellos, ¡tan tiernos!, tan rojos...tan besables.

El sentimiento es mutuo, mientras el duda, ella se pregunta, se cuestiona.
Nadie está seguro.
Incluso, testigos afirman que en ese mismo momento el tiempo se detuvo.
Que nadie pudo seguir su rutina hasta que los dos amantes se hubiesen decidido.

El mundo les dio una oportunidad, de aquellas imposibles.
De aquellas que nunca pasan.
Los labios se les secan, y para solucionarlo, el se los lame; ella se los muerde.
El corazón marca la marcha.
Marcha la carrera, loca por alcanzarlos.
Y sin embargo...un abrazo termina la tensión, la gente puede continuar su vida. El mundo vuelve a girar.

Y los amantes supieron que en ese abrazó se agotó la última posibilidad,
aquella chance que se les otorgó en un minuto de imposibilidad.Y en los hombros de el otro sonríen los dos, se vuelven a lamer los labios, cierran los ojos y se terminan de oler. Una última vez, llenan sus pulmones de aquel aroma que pronto será tan lejano.

El corazón aminora la marcha, se da cuenta que nunca podrá(n) ser.
Que pese a todo lo que vivieron, lo que sintieron, todos esos días de lluvia reunidos bajo un techo anónimo, de aquellas tardes nubladas en que jugaban a encontrar figuras.
Pese a todo, ellos nunca podrían ser.

Y ambos lo sabían, que aquello por lo que pujaban los cuerpos,
aquello por lo que asaltaban ciertos pensamientos.
Pese a que la vida les otorgó una oportunidad imposible.
Ellos nunca iban a poder hacer...simplemente eso.

Ser.

martes, 16 de julio de 2013

Sedimentación

Y sin embargo, ella le supo más amarga que nunca.
La miseria de la deriva socavaba el infinito rito que tanto tiempo condimentó.
Por si fuera poco, la noche deparaba sorpresas aún más amargas:

El concreto congeló sus pensamientos, la plaza heló los discursos, y el llanto: y el llanto manchó su tierno chaleco.
La bencina tampoco lo acompañaba, el marcador bajaba a cero.

En la soledad del auto. Cuando la tormenta se veía ya lejos,
un grito seco expresa el dolor, el desgarro de un significado sin significante.
El agujero en el estomago que-nada-puede-tapar,
las manchas en el chaleco, la amargura de esos labios partidos expresando palabras afiladas que se transforman en vapor.


Y el frió es lo único que puede recordar.


domingo, 30 de junio de 2013

Anoche

Esta noche pareciera que todo cambiase,
mientras el sol se esconde, tengo tiempo para prepararme.
Y poder asegurarme; no fallar de nuevo en los mismo lugares.

Esta noche me preparo para ser distinto
mientras mi armadura canta impaciente,
el camino anuncia su marcha.

Y los recuerdos se asoman entre las estrellas,
y entre las aguas aparecen las caras y los momentos,
pero yo ya no soy el mismo.
Y mi compañero -el miedo- me calma,
Esta noche, esta noche. Todo cambia.








Allá vamos, vida.




Vida, allá voy.

lunes, 13 de mayo de 2013

Des-


De aquellos aires desechables
que sólo se obtienen en la agitación de los dos cuerpos en cuestión

De esa misma forma,
quiero dejar de entender
quiero dejar de pretender.
Y aceptar la sobreinterpretación
de los elementos que no tienen ninguna significación.
Y que la memoria -no sé por qué- no quiere socavar.
Así como me retiro; vuelvo, otra vez.
Y no puedo dejar de atestiguar una decodificación insaciable,
en el escenario de la más inatestiguada perfección,
donde sólo falto yo.
-Miento: si se-

Pretendo que desconozco los simbolismos
y que, me extrañan.
Pero por dentro no dejo de preguntarme,
y me cuestiono.
Hasta cuándo,
cuándo dejaré de fingir.

Deja ya de pensar,
deja ya de luchar.

Hoy. hoy....cabe....llorar.

Aunque no puedo, y no me lo perdonaré.
Tampoco hoy es el día...ni la noche.-

domingo, 14 de abril de 2013

Remordimiento .-


Quiero hacer una pública declaración:

Me declaro culpable
de todo lo que no he hecho
y todo lo que no podré hacer.

Me siento arrepentido
de todo en lo que no me he convertido
y de lo que nunca pude evitar.

Finalmente me retiro,
pido disculpas y les ahorro la molestia
siento no haber podido borrar algunas acciones
ni evitar ciertas decepciones.

Sin embargo no me desdigo
de lo que he caminado y vivido,
y si alguien quiere rebatir
le presto mis zapatos: bienvenido

Porque cuando el camino fue amargo,
sólo se que no me he rendido,
y que tampoco me he arrepentido.

Tan solo siento, no haber sido
todo lo que quise haberme convertido,
ni haber sentido, lo que quise haber vivido.

Y por eso y todo lo anterior
Les pido de corazón:

Perdón.

sábado, 16 de marzo de 2013

Fernanda 3


A veces
te miro.
a veces, sonrio.
me detengo.
a veces.
nos miramos
otras veces
Y sin embargo, todas veces: nos ignoramos.

Tanto tiempo ha pasado,
tanto ha ocurrido.
No obstante, sigo sin entender
aún no comprendo
qué ha ocurrido
qué nos sucedió.
En qué me equivoqué,
por qué soy castigado.

Y sigo estático
sin ideas,
sin convicciones.
Embargado en sentimiento,
en expectativas.
¡Oh!
de esas tan crueles, que me hacen heridas, aquí en el cuerpo.

A veces, pienso que me observas,
a veces, creo que aún tengo chance,
y vuelvo a mirar el suelo,
Aunque nunca me ha dado respuesta alguna.

Y tu te vas, tu marchas, y todo sigue igual
Excepto yo, quien otra vez intenta sonreír
quien otra vez intenta mirar

Y sin embargo, es el mismo.
Sonriendo.
Deteniéndome.
Mirándote.
Ignorándote.